lunes, 23 de abril de 2012

Obsolescencia programada 0 yo 1. Arreglar tu lápiz Wacom Bamboo

Despues de varios intentos de que Wacom me cambiase o arreglase mi pen tablet con la garantía, ya que me decían que me iba a salir más barato comprarme un nuevo lápiz, he decidido solucionarme yo solito el problema.
Los lápices de la Wacom Bamboo Pen, no llevan pilas, por el contrario llevan un ingenioso sistema que permite reconocer la posición y clics que hagas con el lápiz sobre la tabla, pero que es más frágil que una lámina de pan de oro. El manual advierte del cuidado a tener con su uso pero no advierte de que con dejarlo caer desde un palmo sobre la mesa, se te rompería forever y sin cobertura de garantía.

Así que de perdidos al río, vamos a destripar el lápiz Bamboo y solucionarlo. Lo primero es desmontar el lápiz, la primera vez que lo hice me costó un poco, está bien sujeto pero tirando con fuerza y cuidado sale. Hay que separarlo tirando en sentidos opuestos de las dos partes que lo componen:


Una vez desmontado descubro que en la punta tiene un cilindo enrrollado con hilo de cobre muy fino y desgraciadamente partido al medio (si lo hubiera enviado a Wacom no me lo hubiera cubierto la garantía y hubiera tenido que pagar todo, técnico incluido)


Así que lo que hay que hacer es conseguir que la pieza quede unida mediante presión dentro del lapiz para que vuelva a funcionar. ¿Cómo hacerlo? lo primero, hay que rebajar un par de milímetros las muescas que hay en la parte trasera de la carcasa que impiden que la placa del ciruito gire o se mueva dentro:


Yo lo he hecho todo con un cutter pequeño. Al hacer ésto vamos a permitir que la placa presione con más fuerza el cilindo contra la carcasa, puedes hacer alguna prueba sobre tu tablet antes de continuar para comprobar la presión que necesitas. Luego hay que fabricar o usar algo que introducido dentro del lápiz impida que retroceda la placa y libere de nuevo el cilindro, en mi caso he usado un elastómero que viene para sujetar el tambor de las lavadoras nuevas.


Coges la medida aproximada que hay entre el final de la placa y el final del lapiz entero y cortas la goma, haciendole el redondeado para que se pueda introducir dentro de la carcasa.


Ahora hay que empezar a montar el lápiz, mete con cuidado la placa dentro de la carcasa de los botones y, con la goma ya dentro, coloca la otra parte de la carcasa. Si no cierra, saca la goma y recortale un poco más hasta que tengas que hacer un poquito de fuerza para cerrarlo por completo


Y así de fácil!! milagrósamente vuelve a funcionar!! y ahora no se te volverá a romper porque ya no baila la placa dentro del lápiz.






Así que señores de Wacom, fabriquen sus productos con un poco más de cariño que por lo que cobran por ellos deberían estár mejor acabados.

Agradezco a mi pareja que me insistiera en que llamase al servicio técnico, sin su desalentador diagnóstico no hubiera caido en la solución.